El piloto de Williams, Franco Colapinto, sufrió un duro revés en el Gran Premio de Brasil al verse obligado a abandonar la carrera tras un insólito accidente mientras estaba activado el safety car. Colapinto marchaba en el puesto 16 en la vuelta 32 y ya había pasado por boxes en dos ocasiones cuando un golpe con el auto destrozado lo dejó fuera de la competencia, culminando un fin de semana que comenzó con problemas en la clasificación y terminó en frustración para el argentino.
Este ha sido el peor desempeño de Colapinto en la Fórmula 1, quien en los últimos cinco Grandes Premios siempre había logrado ubicarse entre los doce primeros: duodécimo en México e Italia, octavo en Azerbaiyán, undécimo en Singapur y décimo en Estados Unidos.
Mientras Colapinto enfrentaba un día complicado, Max Verstappen, piloto de Red Bull y tricampeón mundial, protagonizó una destacada remontada en la carrera. Largando desde el decimoséptimo lugar, el neerlandés logró abrirse paso hasta alcanzar la primera posición en la vuelta 42 tras superar a Esteban Ocon de Alpine, poco después de la intervención del safety car.
Este triunfo acerca a Verstappen a un nuevo título, extendiendo su ventaja a 57 puntos sobre Lando Norris de McLaren, quien partió desde la pole pero terminó en sexta posición, mientras que el monegasco Charles Leclerc, de Ferrari, finalizó quinto.
En declaraciones posteriores a la carrera, Colapinto expresó su tristeza y frustración por el resultado en Brasil. “Fue un golpe muy fuerte, el auto se destrozó”, declaró, y lamentó el esfuerzo perdido del equipo Williams. “Quiero pedirle perdón a todo el equipo que trabajó muchísimo para poner el auto en pista; ellos no se merecían esto”, afirmó visiblemente afectado. La escudería había trabajado contra el reloj para reparar los daños sufridos en el monoplaza durante la clasificación.
Al analizar los factores que condujeron al choque, Colapinto explicó que las condiciones de la pista estaban comprometidas por una gran acumulación de agua. “Una pena. Entramos en boxes y pusimos gomas intermedias otra vez, pero había un río tremendo en la recta, y en cuanto pasé por ahí, fui un pasajero”, señaló el piloto de 21 años, refiriéndose a la pérdida de control en el sector más complicado del trazado.
A pesar de la dura experiencia, Colapinto se mostró positivo de cara a la próxima carrera en Las Vegas, prevista para el 24 de noviembre. “Volveré más fuerte en la próxima carrera, pero hay que recuperarse de esto”, expresó con determinación. “Fue un día malo, un fin de semana muy complicado, pero confío en que el equipo y yo podremos retomar el buen nivel en la siguiente fecha”, concluyó.
El próximo GP en Las Vegas representará una oportunidad para Colapinto de dejar atrás esta experiencia desafortunada en el Autódromo José Carlos Pace y volver a demostrar el potencial que ha mostrado en sus últimas competiciones de la temporada.
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