Candela Francisco, dueña del continente y orgullo de nuestra ciudad

El crecimiento que ha desarrollado Candela Francisco a sus 16 años dentro de esta disciplina es asombroso, este año logró darles una mayor magnitud a sus logros tras consagrarse campeona de América de ajedrez en un torneo disputado en La Habana, Cuba. Este triunfo la depositó dentro de los mejores ajedrecistas del mundo, con el título de Gran Maestra Femenina y siendo considerada la mejor de nuestro país.

Además, clasificó para la Copa del Mundo que se disputará en Bakú, capital de Azerbaiyán. Allí, enfrentará a las mejores del mundo de países con mucha tradición como Rusia o Estados Unidos. Es un viaje de 22 horas a Bakú, para el cual el intendente de Pilar, Federico Achával, prometió pagar los pasajes, al igual que lo hizo para el torneo continental que se organizó en Cuba.

En una nota con Infobae, la pilarense dio a conocer cómo fueron sus inicios. “Empecé a jugar cuando tenía 9 años. En ese momento, mis papás ayudaban en un comedor de niños, en Villa Rosa los sábados por la mañana. Durante ese tiempo me anoté para realizar alguna actividad recreativa cerca de casa. Descubrí que en un shopping de Pilar daban clases de ajedrez todos los sábados en ese horario”, comenzó relatando.

“Al terminar mis papás me preguntaron si me había gustado y si quería volver. Yo les respondí que sí. Luego de un par de meses de clases, el profesor pide hablar con mi mamá y le dice que tenía condiciones”, cuenta Candela.

“A través de mi abuelo encontramos que había una escuela municipal de ajedrez en Pilar. Entonces empecé a ir con mis queridos profes Raúl Pérez y Boris Pápez. Al tiempo el profesor nos comenta que había un torneo en Villaguay, Entre Ríos y decidimos ir”, agregó.

“Cuestión que termina el torneo y quedé tercera. Después me enteré que era el Nacional, el torneo más importante de Argentina”. Su frescura e inocencia la había llevado a estar entre las mejores de Argentina sin darse cuenta.

Candela se metió cada vez más dentro del tablero de ajedrez tras ese torneo. Al año siguiente sale campeona del Torneo Nacional de Argentina invicta con 9 de 9 puntos, en lo que sería tan solo el inicio de una seguidilla en la que durante sus pocos años dentro de este deporte cosechó 8 medallas nacionales y 8 internacionales.

A la hora de expresar lo que pasa por su cabeza en cada partida que disputa, señaló lo siguiente. “La cantidad de jugadas que puedo ver por anticipado depende mucho de la posición. Es que cuando vas a analizar una posición, definís las jugadas de tu rival que consideras posibles. Y luego a cada una de esas las dividís en variantes y así en forma sucesiva. Hay líneas que puedo considerar hasta 10 posibles jugadas y otras 5, pero con muchas opciones en el medio”, mencionó.

“Hay jugadas que me sentí realmente bien al hacerlas. O porque eran muy difíciles o por una gran combinación. La mejor sensación es cuando te das cuenta de eso en plena partida. Es como una satisfacción que te viene por dentro”, explica Candela.

Por último, se refirió a lo que le aporta el ajedrez a su cotidianeidad. “Creo que mi formación en este juego me ayuda a tomar buenas decisiones. Un error puede llevar a grandes problemas, al igual que en una partida. También pensar muy bien lo que voy a hacer. El juego y la vida tienen en común que todo lo que uno hace tiene consecuencias´. Pueden ser positivas o negativas, por eso es importante pensar bien para tomar una buena decisión”, concluyó.