Rossi sufrió un revés inesperado y la definición quedó abierta
El Misil abandonó por una rueda trabada y dejó pasar una oportunidad clave para campeonar, mientras su compañero y rival, Emiliano Stang, se llevó la victoria y llega fortalecido a la definición.
El regreso del Turismo Competición 2000 al autódromo "Martín Miguel de Güemes" de Salta, después de seis años, dejó una multitud y una carrera cargada de golpes de escena. Y entre ellos, el más fuerte fue el que afectó directamente a Matías Rossi, que debió abandonar por un problema insólito y quedó condicionado de cara al cierre del campeonato.
El piloto delvisense llegó a Salta con la misión de sostener su liderazgo y encaminarse hacia la definición del Gran Premio Coronación con margen. Pero el destino le jugó una mala pasada y un inconveniente en el cambio obligatorio de neumáticos dejó una de las ruedas trabada, lo que le impidió volver a pista. El Toyota quedó detenido más allá de la calle de boxes y Rossi regresó al garaje con la frustración visible de saber que perdía una oportunidad clave.
Ese abandono fue inmediatamente capitalizado por Emiliano Stang, su compañero de equipo en Toyota Gazoo Racing y principal rival en la lucha por el título. El entrerriano, que también vivió una carrera accidentada tras un roce inicial con Nicolás Palau en la curva de la Cola del Avión, se recompuso y se quedó con la victoria, su cuarto triunfo del año, que lo confirma como el piloto más ganador de 2025.
Con ese resultado, la diferencia entre Rossi y Stang se redujo a 17 puntos, cuando aún quedan 32 en juego. De liderar con firmeza, el Misil pasó a afrontar una definición abierta, exigente y sin margen de error.
La final salteña completó 31 giros en 40 minutos de acción intensa y dejó al TC2000 con un escenario vibrante de cara al 19, 20 y 21 de diciembre, en el autódromo "Eusebio Marcilla" de Junín, donde se definirá la corona 2025 entre los dos pilotos de Toyota, con un Rossi que llega con 193 puntos, y un Stang que viaja fortalecido a 17 unidades.