Mensaje del párroco Ritacco por Navidad: un llamado a vivir la paz como el mayor regalo
En su saludo navideño, el párroco Jorge Ritacco invitó a reflexionar sobre el verdadero sentido de la Navidad, destacando el nacimiento de Jesús como el gran regalo de Dios a la humanidad y llamando a pedir y construir la paz interior, social y espiritual.
En el marco de las celebraciones de Navidad, el párroco Jorge Ritacco compartió un mensaje de reflexión y esperanza, invitando a la comunidad a vivir estas fiestas desde un sentido profundo, centrado en la fe y en el valor de la paz.
Ritacco señaló que, en estos días, muchas personas salen a las calles en busca de regalos para sus seres queridos, pero recordó que la Navidad en sí misma es un gran regalo, ya que representa el don de Dios al mundo a través del nacimiento de Jesús. "Jesús se hace hombre, muere en la Cruz para salvarnos y nos hace hijos del Padre. Ese es el mayor de los regalos", expresó.
El sacerdote destacó que el anuncio de los ángeles a los pastores -"gloria a Dios en el cielo y en la tierra paz a los hombres"- resume el verdadero sentido de la Navidad: Jesús viene a traer la paz, una paz distinta a la simple ausencia de conflictos. En un contexto mundial marcado por enfrentamientos y divisiones, subrayó que la Navidad trae la paz de Dios, una paz que nace del interior del hombre y del encuentro con Él.
En ese sentido, recordó que Jesús resucitado se presenta a sus discípulos con el saludo "la paz sea con ustedes", una expresión que la Iglesia repite en cada misa. Por eso, consideró que el regalo más importante que se le puede pedir al Niño Jesús, además de la salvación, es la paz: en el mundo, en la patria y en las relaciones cotidianas, muchas veces atravesadas por discusiones y falta de diálogo.
Ritacco remarcó que la paz verdadera surge del corazón reconciliado, del silencio, la oración y la preocupación por el otro. "La caridad es fruto de la paz", afirmó, y llamó a no dejar pasar esta Navidad sin un compromiso real con la reconciliación y el amor al prójimo.
Finalmente, el párroco invitó a pedir en esta Navidad la gracia de ser instrumentos de paz, retomando las palabras de San Francisco de Asís. "Que recibamos a Jesús con la paz y que seamos portadores de esa paz a un mundo que está lejos de Dios", concluyó, deseando a todos una Navidad llena de frutos, bendiciones y la paz del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.