Kicillof busca aprobar deuda y Presupuesto en medio de fuertes tensiones políticas
Tras el feriado del lunes, el Gobierno bonaerense enfrenta jornadas clave en la Legislatura: necesita los dos tercios para avalar un millonario endeudamiento que condiciona salarios y obras, mientras negocia con intendentes y la oposición la creación del Fondo de Inversión Municipal y la aprobación del Presupuesto 2026.
La Provincia de Buenos Aires transita una semana decisiva para su futuro financiero, en medio de un calendario legislativo acelerado y negociaciones cruzadas con intendentes y bloques opositores. Tras el feriado del lunes, el Gobierno de Axel Kicillof buscará que Diputados emita dictamen sobre el proyecto de endeudamiento y que el miércoles ambas cámaras aprueben el Presupuesto 2026 y la Ley Fiscal Impositiva.
El punto más sensible es el pedido de financiamiento, definido por el propio oficialismo como "la madre de todas las batallas". Para avanzar, necesita dos tercios de los votos en Diputados y Senado, una vara alta que obliga a tender puentes con la oposición y habilita nuevas tensiones políticas. Según adelantaron funcionarios bonaerenses, la aprobación del endeudamiento es clave para sostener pagos salariales y garantizar el funcionamiento administrativo en los próximos meses.
El proyecto contempla dos autorizaciones centrales: una para tomar deuda por hasta 1.045 millones de dólares y otra por hasta 1.990 millones. También incluye la emisión de letras por 250 millones de dólares y habilitaciones para que las empresas provinciales Centrales de la Costa y AUBASA puedan financiarse por montos de hasta 150 y 250 millones de dólares respectivamente. Los recursos, según el Ejecutivo, se destinarían a refinanciar pasivos y sostener el ritmo de obras públicas en toda la provincia.
Pero el foco del conflicto es el artículo 3, que crea el Fondo de Fortalecimiento de la Inversión Municipal (FIM), alimentado por un 8% de la deuda que logre colocar la Provincia. Intendentes de distintos signos políticos rechazan que la llegada de fondos dependa directamente del endeudamiento y reclaman un monto fijo para garantizar previsibilidad. En varios municipios insisten en que no cuentan con recursos suficientes para afrontar salarios y aguinaldos, por lo que exigen certezas antes de acompañar el paquete oficial.
En paralelo, se mezclan negociaciones por cargos aún vacantes: puestos en empresas del Grupo Bapro, en el Banco Provincia, el Tribunal Fiscal y el Consejo Federal de Educación forman parte de la discusión que atraviesa al oficialismo y la oposición.
Mientras tanto, el miércoles será un día clave. Diputados sesionará desde las 14 para debatir el Presupuesto y la Ley Fiscal, y el Senado hará lo propio a las 19. La vicegobernadora Verónica Magario aceleró el cronograma para intentar aprobar todo el paquete en una misma jornada. A diferencia del Presupuesto, el endeudamiento requiere mayorías especiales: 62 votos en Diputados -donde el peronismo tiene 37- y 31 en el Senado -donde el PJ suma 21-.
El Presupuesto 2026 asciende a 43 billones de pesos, frente a los 36 billones que se ejecutarían este año. Contempla inversiones de capital por 3,2 billones, más de 1,7 billones para promoción y asistencia social, 1,7 billones para salud, 1,3 billones para educación y 1,4 billones para seguridad y el sistema penitenciario. Para el sector productivo prevé inversiones por 60.000 millones. En tanto, la Ley Fiscal introduce una baja nominal en la patente y no proyecta aumentos reales en el resto de los impuestos.
Con negociaciones al límite y varios frentes abiertos, la Provincia encara una semana en la que se juega buena parte de su margen financiero para el 2026.